Esta mañana de viernes, diez trabajadores de la sede de Anses ubicada en Muñecas al 300 de la capital tucumana no pudieron ingresar a sus lugares de trabajo. Afuera, decenas de personas aguardaban, con su turno en mano, ser atendidas. Los empleados que debían hacerlo acababan de ser desvinculados de manera arbitraria y sin previo aviso.
Esta dependencia cuenta con dieciséis empleados. Es decir, el personal fue reducido a menos de la mitad haciendo imposible cubrir la demanda.
El motivo: la reducción del estado que pregona el gobierno nacional presidido por Javier Milei. En este caso, el gasto se entendía como diez salarios de trabajadores estatales que brindaban atención al público o tareas administrativas en el organismo.
Jimena Posse Silva, delegada regional del Anses y miembro de la comisión directiva del Sindicato de los trabajadores de la Administración Nacional de la Seguridad Social (SECASFPI) habló ante los micrófonos de FM latucumana 95.9 y contó lo sucedido: “Hoy compañeros y compañeras se presentaron a trabajar con normalidad como todos los días, al intentar fichar no pudieron fichar, tenían revocada su huella digital y también el acceso al sistema. Fue sin previo aviso. La verdad que esto no solamente es una falta de respeto para los trabajadores y trabajadoras, sino también para los beneficiarios que tienen su turno y no pueden ser atendidos porque las claves están revocadas”, dijo.
Y contó: “Esta sede fue abierta el año pasado para desagotar la confluencia de Córdoba y 25, son compañeros que tienen contrato vigente hasta diciembre del 2024. Tienen contrato garantizado para todo el año”.
Además, denunció que el martes pasado vivieron una situación similar con trabajadores con cargos jerárquicos que estaban en planta permanente. “Ese día se constataron 320 bajas que empezaron de la misma manera que hoy: con problemas para acceder con la huella y bajas en el sistema, luego les empezó a llegar los telegramas informando el despido”, afirmó.
Y argumentó: “Lo que no se puede entender que esto sería por un achique del estado, y la verdad que acá no se están ahorrando nada porque son contratos vigentes, y el contrato lo tienen que pagar en su totalidad. Esto es un gasto mayor para el estado”.
Y sostiene: “En Anses no sobra nadie, falta gente”.
Afuera de la sede se encontraban los trabajadores despedidos, entre ellos Milagros Toro. Milagros tiene 34 años y trabaja en atención al cliente, ella se encuentra en la parte principal, donde más se concentran los trámites. Mientras Milagros no puede ingresar, la fila de tucumanos y tucumanas que no pueden ser atendidos crece. “Me di con la noticia está mañana de querer ir a marcar huella y no me registraba”, cuenta. En el día de hoy, por una decisión arbitraria del gobierno nacional, Milagros se queda sin su único ingreso.
Posse Silva cuenta cuáles son los pasos a seguir ante los despidos: “Esperamos la notificación fehaciente porque al día de hoy solo tenemos la baja del sistema, apenas reciban los telegramas se pondrán en contactos con los abogados porque esto es ilegal”.
Por otro lado, afirmó que hay turnos asignados hasta marzo teniendo en cuenta que trabajan dieciséis personas y que los beneficiarios serían atendidos por las mismas. Con las bajas, no se puede hacer frente a la atención al público.
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