En la Legislatura tucumana, se ha iniciado un debate sobre el uso de celulares en los establecimientos educativos de la provincia. La discusión, impulsada por la Comisión de Educación, busca abordar los efectos y las posibilidades que el uso de dispositivos móviles tiene en el contexto escolar, con el objetivo de regular su empleo en las aulas.
La iniciativa fue presentada por el legislador Carlos Gómez, quien organizó un encuentro con funcionarios del Ministerio de Educación y otros actores relevantes del sistema educativo. Entre los participantes, se encontraban el legislador Aldo Salomón, presidente de la Comisión de Educación y la profesora María Gabriela Gallardo, secretaria de Estado de Educación. También asistieron el subsecretario de Asistencia Legal y Técnica, Dr. Facundo Juez Pérez, y Pablo Plaza, referente de Educación Secundaria, junto a un equipo técnico que incluyó psicólogos y profesionales del área pedagógica.
Durante la reunión, el legislador Carlos Gómez expresó que el proyecto busca encontrar un equilibrio en el uso de celulares en las escuelas, sin prohibirlos de manera estricta. “Tal vez prohibir los celulares en las escuelas suena medio fuerte, pero la disyuntiva principal de todo esto es el uso del celular en las escuelas”, señaló Gómez. En su intervención, dejó en claro que no se trata de una prohibición absoluta, sino de regular el uso de dispositivos móviles dentro del horario escolar para optimizar el proceso de enseñanza-aprendizaje.El proyecto de ley, que está en discusión en la Legislatura, contempla diferentes aspectos sobre cómo los celulares afectan el desarrollo emocional y académico de los alumnos. Según Gómez, el uso de celulares en los centros educativos debe ser controlado para minimizar cualquier impacto negativo en los niños y adolescentes, ya sea en términos psicológicos o afectivos.La secretaria de Estado de Educación, María Gabriela Gallardo, también intervino en el debate, destacando la importancia de integrar las tecnologías de la información y comunicación (TIC) en las aulas de manera responsable. «En nuestra provincia, en cada institución hay un marco normativo que reglamenta los acuerdos escolares de convivencia», comentó Gallardo. Estos acuerdos definen cómo y cuándo es apropiado el uso de celulares en el entorno escolar, ya sea en instituciones públicas o privadas.Por su parte, el legislador Aldo Salomón subrayó la necesidad de ajustar las normativas vigentes para reflejar los cambios en el entorno educativo. El uso de celulares en las aulas ha generado un debate amplio, tanto en términos pedagógicos como sociales, y este proyecto tiene como fin proporcionar herramientas legales que permitan mejorar la convivencia en los establecimientos escolares.A lo largo de la reunión, los especialistas en educación presentaron argumentos a favor y en contra del uso de dispositivos móviles en las aulas. Pablo Amadio, referente tecnológico de Educación Secundaria, explicó que, si bien los celulares pueden ser una herramienta útil en ciertos contextos pedagógicos, su uso indiscriminado puede convertirse en un distractor. Amadio coincidió con el planteamiento de Gómez, quien aseguró que «queremos que sea una herramienta que ayude a mejorar cada vez más el proceso de enseñanza – aprendizaje».