Tras la resonante victoria de Tarucas en Montevideo por 35-28 ante Peñarol, el entrenador Álvaro Galindo no dudó en destacar la importancia del triunfo y la actitud del equipo. “Sin dudas, fue el mejor partido del año. Ganarle a un gran rival, de visitante, y reponernos de la semana pasada muestra el carácter total de este equipo. Supimos estar presentes en los momentos difíciles”, remarcó el head coach con visible orgullo.
Galindo también se mostró entusiasmado con los dos debutantes del equipo, Mateo Pasquini y Benjamín Farías, a quienes elogió por su entrega y preparación. “Seguimos apostando al desarrollo de jugadores, no solo por necesidad sino también como una búsqueda de alternativas. Benja lo entreno desde chico en el club y verlo debutar es una alegría enorme, no solo por ellos sino por cómo el equipo los arropó”, explicó.
De cara al futuro, el entrenador fue claro: el objetivo es mantener el nivel y seguir construyendo. “Hay que volver a jugar bien, proponer, ajustar lo que haya que ajustar. Este partido lo ganamos por una defensa sólida en el minuto 80. Esa es la fortaleza del equipo: no esperar que las cosas pasen, sino salir a buscarlas”, concluyó Galindo con ambición renovada.